Walmart ha decidido ampliar sus instalaciones en Pudahuel para su nuevo centro logístico. Y no será uno más, sino uno de los mayores de la cadena, tanto en extensión como en número de personas que empleará.

Invertirá US$ 80 millones y la decisión de crearlo se tomó a fines de 2020, con el fin de responder a la alta demanda del comercio electrónico y a otros operadores que ya están comenzando a ofrecer despachos a solo horas de la compra.

Tras varios meses de discretas negociaciones y análisis, la noticia terminó siendo confirmada en la justicia: la firma estadounidense recurrió esta semana de protección en contra de la Dirección de Obras de Pudahuel, porque al iniciar los trámites se encontró con que ahora la zona donde pretendía ampliar su centro de distribución está categorizada como rural y, por lo tanto, no puede ni siquiera pensar en levantar sus nuevas instalaciones allí.

Ello, pese a que Lo Aguirre es hoy un área donde coexisten bodegas y centros de distribución o almacenaje de otras firmas como Salcobrand, Unimarc, San Francisco y varias más.

¿Cuándo cambió el plano regulador? Eso nadie lo sabe, y por ello fue que Walmart acudió a la Corte de Apelaciones de Santiago. Hasta el cierre de esta edición, el recurso no había sido admitido a trámite, ni la municipalidad de Pudahuel notificada.

Con hidrógeno verde

Según el recurso, firmado por el abogado Cristóbal Osorio, todo comenzó el 26 de mayo pasado, cuando la Dirección de Obras Municipales de Pudahuel emitió el certificado de informaciones previas, un documento regularmente solicitado antes de comenzar cualquier trabajo en un terreno.

Allí decía que Lo Aguirre es una zona rural, en la cual se puede construir, pero no a la escala que Walmart planea: 75 mil metros cuadrados, que duplicarían la superficie ya construida.

La firma compró en 2008 ese paño, construyó su centro de distribución en 2013, reservando una parte del terreno para futuras ampliaciones.

El nuevo proyecto considera pasar a un centro logístico que por sus cifras se convertirá en uno de los más relevantes y estratégicos de la cadena: 75.000 metros cuadrados de infraestructura, cuya puesta en marcha requerirá de 400 puestos de trabajo y sistemas operativos de última tecnología, que permitrirán hacer de este lugar uno de los más modernos centros de distribución omnicanal de Chile.

El proyecto, además, considera una flota de grúas eléctricas impulsadas 100% con hidrógeno verde: DF MAS confirmó que Walmart está en conversaciones para que esta nueva energía sea generada con la electricidad de paneles solares que estarán en la cubierta de las instalaciones que se busca levantar.

Además, se planea que todos los vehículos que entren y salgan del lugar fomen parte de una flota de distribución totalmente eléctrica.

“Su objeto es ser el principal lugar de acopio, recepción y despacho de mercadería hacia diferentes supermercados de la cadena Walmart-Lí́der en el país. Dada su ubicación cercana a rutas y autopistas neurálgicas que permiten conectarlo eficazmente con el resto del país y la ciudad de Santiago. Asimismo, el Centro de Distribución Lo Aguirre tiene la particularidad de permitir un racionalizado y eficiente abastecimiento de los supermercados de la cadena, logrando importantes economías y eficiencias en la circulación y recorrido de vehículos de abastecimiento”, detalla la firma ante la Corte.

Walmart todavía no ha anunciado oficialmente el proyecto. Contactada por DF MAS, la compañía prefirió no ahondar en el caso. Ahora todo está en manos de la justicia, aunque en paralelo se trabaja en otros frentes para poder levantarlo.

En todo caso, además de Walmart otras empresas han enfrentado situaciones similares, debido a las numerosas polémicas que se generaron con el antiguo Plan Intercomunal de Santiago y sus posteriores modificaciones, que permitieron diversas obras en toda esa zona.

En medio del camino

“El acto recurrido dispone un criterio que contraviene lo señalado por la Dirección de Obras de la Municipalidad por 30 años, donde fijó́ que las condiciones urbanísticas aplicables al predio eran zona urbana”, sostiene la firma en su reclamo legal.

El documento detalla la historia de los cambios al uso del suelo en la zona desde que se convirtiera en un área de expansión urbana de la década de los ‘80.

Varios años después se desarrollaron en su entorno numerosos proyectos habitacionales, comerciales y carreteras. Todo eso hizo que hoy Lo Aguirre sea estratégico.

“El Centro de Distribución Lo Aguirre se construyó́ proyectando una ampliación de sus instalaciones con la finalidad de lograr una mejor y más eficiente cadena de distribución de sus productos a lo largo del país y especialmente con ocasión del Covid, proveer de mejor manera los requerimientos de consumo en la ciudad de Santiago”, explicita la firma ante la Corte de Apelaciones.

Las comunicaciones por carretera desde esa zona fueron un aspecto clave para la elección: a 7 km de Vespucio, cerca del cruce entre la Costanera Norte y la ruta 68 y además con salida a esa autopista, que une Santiago con el puerto de Valparaíso, un aspecto muy relevante para un centro logístico que distribuirá millones de paquetes cada año.

Justo en el cruce de caminos más importante del retail.

Todo por el omnicanal

En Chile, Walmart está enfocado en optimizar y acelerar su propuesta omnicanal para que cada vez más personas usen el comercio electrónico.

Y Lo Aguirre les permitirá atender de mejor manera el rápido y enorme crecimiento que han experimentado las operaciones ecommerce.

Hoy en día este centro de distribución trabaja principalmente con productos de abarrotes y comestibles, pero en sus nuevas superficies tendrá un mayor surtido.

Ya el año pasado la firma anunció inversiones por US$ 50 millones para reforzar la omnicanalidad.